Adopción de ROSITA

La historia de Rosita es una de esas que cuesta contar sin sobrecogerse. No queremos hacer hincapié en lo duro que ha sido para ella pero tenemos que contarlo porque ella es una luchadora y merece que el mundo sepa cuanto merece que alguien le cuide.
No sabemos su origen, ni cómo ha vivido; simplemente apareció un día por una calle dolorida y muy aturdida ya que unos días antes había rociado sobre su lomo un sustancia química muy fuerte, quizás pegamento.
Corriendo fuimos al veterinario, tras medicarla, curarla y darle cariño se va recuperando días tras día. Lo increíble es ver como desde el primer momento dejó hacerse las curas, aunque le dolía ella seguía confiando en el ser humano, no ha perdido la esperanza. ¿Vamos a perderla nosotros? Seguiremos luchando contigo, Rosita.